Post patriarcal

—«Gracias.»

–«¿Gracias por qué?»

–«Por hacerlo tan fácil.»

–«¿Tan fácil?»

–«Sí, los demás lo hacen muy complicado, ya sabes. Dan muchas vueltas, preguntan mucho. Te intentan seducir o te envían una foto de su rabo.»

Eso me lo dijo Susana.

Ou mamma.

No te confundas, se refería al proceso de compra, no al servicio.

Con el servicio no había duda de que no había reclamaciones.

Para ligar, la mayoría de hombres van al gimnasio. Pero no hay mujer que te vaya a decir que eso es lo que más atractivo le resulta en un hombre.

Además, ligar por estar bueno te garantiza el sepso y las relaciones de peor calidad, más tóxicas y tortuosas con las que puedas soñar.

Es como vender por simpático.

¿Has tenido clientes locos? ¿Has gestionado a vendedores y tenías a un especialista en atraer a clientes problemáticos?

La culpa no es del cliente. Ese cliente estaba loco antes y marchaba feliz por el mundo sin interferir en tu vida. Quien se puso delante suyo y lo llevó a tu casa fuiste tú (o tu vendedor).

Cuando vendes por fácil eso no pasa.

Fácil para el que compra, no te vayas a liar. El que vende tiene que eliminar 15 hábitos muy arraigados.

Erradica esos hábitos y tu comprador te dará las gracias y su dinero.

Lo explico con detalle en una conversación que mantuve con Marina Febles. A ella le conté esta anécdota y los 15 hábitos.

No es para ligar.

– Es para ligar
– Es para vender
– Es para conseguir mejor curro
– Es para conseguir una entrevista con alguien a quien admiras
– Es para que el director general de una multinacional hable contigo

Es para conseguir cosas en la vida. Para eso es.

Si lo escuchas te va a gustar tanto, y le vas a ver tanto el sentido, que te vas a proponer ponerlo en práctica.

Pero no lo vas a hacer.

Vas a decir que mejor mañana, pasadomañana, a la semana que viene.

Vas a decir eso porque lo que cuento es tan bueno y lo vas a ver tan claro, que vas a tener miedo a que te concedan lo que pidas.

Así de poderoso es.

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