He trabajado con miles de emprendedores y puedo hacer un ranking de los motivos más frecuentes por los que fracasan.
Puedo y lo voy a hacer, y también la solución a cada uno. Son 7, de más a menos común:
Discusiones con socios. Fácil de solucionar, difícil de aceptar: emprende sin socios.
Se quedan sin pasta. No sin facturación, sin tesorería.
También fácil: no gastes lo que no tengas y cobra por adelantado, o lo que es lo mismo, no seas un pusilánime. Y sí, ya sé que en tu sector nadie lo hace.
Tienen una idea de mierda que nadie quiere. Este es el más fácil de solucionar. ¿Tener una buena idea? No, eso es muy difícil. Con que no te enamores de tu idea vale, o lo que es lo mismo, no tener el ego del tamaño de una piscina olímpica.
Incapacidad para observar al mercado. No para escucharle, para observarle. Para ver lo que hacen (no lo que dicen que hacen).
Incapacidad de priorizar. Días decidiendo qué contar en la web, tipografías, colores y logos, pero el teléfono con la batería a tope
Cobardía. No ir, no hablar, no salir, no cerrar, no enviar, no insistir, no molestar. Un par de leches y se soluciona. Si las necesitas, me avisas.
Inacción lo llaman algunos, que es un eufemismo de pereza. En los no descerebrados se corrige cuando se quedan sin pasta.
«¡Oh!», te dirás.
«¿Y las ventas?», te preguntarás.
«¿No están las ventas?», te dirás, incrédulo.
Pues mira, no. No están las ventas.
No están las ventas porque vender no es usar tal o cual técnica. Vender lo es todo. Todo lo anterior y todo lo que no he mencionado.
Me trae sin cuidado si eres emprendedor o no.
Si aspiras a vender –a vender digo, no a llegar derrapando a objetivos algunos meses; me refiero a vender grandes cantidades en una fracción del tiempo que necesitas tus competidores o compañeros–, debes tocar todos los elementos, jugar con todas las reglas para que el partido se ponga a tu favor tanto como sea posible.
Y eso es lo que enseño exactamente en este newsletter.
Vale para empresarios
Vale para emprendedores
Vale para vendedores
Pero solo vale para ambiciosos
Y no quiero a nadie que no lo sea, porque no va a entender una mierda: