Ya me gustaría que se me hubiera ocurrido esta frase a mí

Sergio, un suscriptor, me comentó hace que sí, que insistir es importante, pero que no de cualquier manera.

Que insistir, cualquiera puede insistir y claro, luego tienes a esa gente de LinkedIn que te envía 14 mensajes copia-pega, su catálogo de productos en pdf y te despediden con honores.

Que si sería un placer, que si gracias por su tiempo, que si estamos a su servicio, que si quedamos a su disposición.

Cosas que pasan, una tipa me insultó muy fuerte la última vez que dije que hablar así produce gonorrea.

Ahora ya sabes. Faltar bien, si te despides atentamente.

Sergio tiene razón, pero.

Pero, pero, pero.

Pero…

Conviene recordar una cosica:

Para todo en la vida, bien mejor que mal.

Superado eso, ojo. Ojo con el…

  • …esto hay que hacerlo bien
  • …no cualquiera puede
  • …no vale de cualquier forma

Ese pensamiento es peligroso porque te lleva a no hacer cosas. Ni buenas ni malas. Y resulta que para pasarse la vida hay que hacer cosas.

Primero malas, luego buenas.

Sin las primeras no encuentras las segundas.

Atiende, que viene la comadreja.

Los objetivos apestan. Los que se marca la mayoría, quiero decir.

Fíjate objetivos, pero no como lo hace todo el mundo, sino como dice el gran Ben Settle…

Olvídate de los objetivos que dependen del resultado (p. ej.: alcanzar X facturación este año) y márcate objetivos que no dependan del resultado (p. ej.: escribir un email cada semana o leer 10 minutos cada día).

Porque hagas lo que hagas, y aunque lo hagas como el culo, siempre conseguirás más resultados que quien no lo haga. Es decir, que el 99 % de la gente.

Si quieres un buen listado de cosas que hacer…

Cosas muy diferentes a cómo las hacías hasta ahora…

Cosas que te harán la vida más fácil a ti y le gustarán mucho al director de tu banco…

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