El otro día cené con antiguos compañeros de uni.
Ingenieros, pero de bien. Con mundo y con idiomas. Y MBA.
Y en multinacionales de esas que cuando eres pequeño te dicen: «Si te esfuerzas mucho podrás trabajar ahí».
Hablamos de pasta, eso ya lo imaginas.
De cómo ganarla, es decir, de qué estudiar, de qué culo chupar y durante cuánto tiempo.
De las horas, de los findes, de los viajes y de cuánto podrás disfrutar de la vida el día que la artritis llame a tu puerta.
También se tocaron ideas de negocio.
Lo que habría que inventar, a dónde ir y con quién hablar.
Y cuando digo «hablamos» quiero decir «hablaron.»
Tú imagina que le digo a gente hiper inteligente, hiper trabajadora e hiper productiva:
Chicos, que no. Eso que nos han contado, no es.
Lo de las ecuaciones diferenciales. Ni aquello que apuntábamos en las chuletas.
Que esto va de vender un poco mejor que el de al lado.
Y cuando sabes eso…
…ni carrera
…ni máster
…ni genuflexión feladora
…ni domingos viendo el Bernabeú desde una planta 37
Y no es que se hubieran ofendido, no es eso, es que me hubieran encerrado por loco.
«Si con esto no se puede, cómo se va a poder sin esto, maldito retrasado. Anda, calla y acábate la dorada.»
Terrorífico.
Adquirimos herramientas para que nos liberen pero las usamos para crear un muro y nos quedamos encerrados dentro.
Y a más estudiado, más domingos trabajados y más culos lamidos, más alto el muro.
Y después de algún tiempo viendo el muro acabamos creyendo que coincide con los límites del mundo.
Y que con lo que ha quedado ahí dentro… con esas herramientas y con ninguna otra, con esas herramientas terriblemente pesadas y difíciles de manejar… es con lo único con lo que tenemos permitido luchar.
Y se nos olvida que para pescar solo se necesita un palo…
…y un maldito banco de peces.
En el newsletter te enseño todo lo que necesitas para bordar cualquier reunión.
No es un portátil, ni un powerpoint.
Cabe en el bolsillo y no es un smartphone.
Y te aseguro que con eso puedes pescar bastante más de lo que jamás llegarás a comer.
No necesitas una ingeniería para entenderlo, cuesta menos que un MBA y da bastante más dinero. Te apuntas aquí: