Cómo bordarlo en un proceso de selección

Es lo que te digo… mi idea es meterme a profesor, ¿sabes?, y por las tardes hacer lo de entrenador personal…

Eso lo decía el pequeño. El alto contestaba:

Igual te digo… eso si no tienes contactos, ni te molestes. Las oposiciones sí, pero lo otro, sin contactos, no lo veo.

Ni 16 años tenían. Me recordó a cuando yo era joven, pervertido y alocado.

Y gilipollas.

Ahora ya no soy joven ni alocado.

Ni tan gilipollas.

Atiende.

Si le voy a dar mi puto dinero a alguien que me va a hacer sudar, madrugar y que me va a provocar agujetas, me trae sin cuidado que seas el puto hijo de mi puto hermano siamés.

Si me voy a poner en manos de alguien que me puede provocar una lesión o convertir mi cuerpo en un buque de acero inoxidable quiero al puto mejor.

Y como no sé identificar al puto mejor elegiré al que me parezca el puto mejor. Importante detalle.

Sustituye por lo que quieras…

Nadie se la va a jugar con alguien que…

  • Le puede amargar el fin de semana…
  • O conseguir que le despidan…
  • O que le ponga en ridículo ante sus compañeros…

Los únicos trabajos que se consiguen con enchufe son trabajos de mierda. Trabajos protocolarios, sustituibles o prescindibles.

O políticos.

Perdón por el pleonasmo.

Aquí hablamos de decisiones importantes. De vidas divertidas y lucrativas.

Por eso debes apuntarte al newsletter. Lo haces aquí: