Soy idiota.
Ya sabes lo de que cada semana me doy cuenta de lo idiota que era hace una semana. Y que imagines a cuánto asciende el nivel de estupidez si vamos atrás varios años.
Fíjate si era idiota que antes decía era que ganar dinero es difícil.
Soy idiota pero no me he flipado, tranquilo.
La frase completa era que ganar dinero es difícil porque es lo único por lo que le gusta a todo el mundo.
He ahí la estupidez. En confundir gustar con querer.
Nada que ver.
Algo te puede gustar pero no quererlo. O querer más otras cosas.
Por ejemplo, la mayoría prefieren tener razón a tener dinero.
Tener razón ayer u hoy, no mañana. En este matiz hay una lección muy rentable, si no la has visto detente un rato.
Algo puede gustar y dar miedo. La montaña rusa. O el crack. Quizás.
El dinero, por supuesto. A la mayoría les aterra.
Les aterra pedirlo, gestionarlo, poseerlo y, sobre todo, les aterra lo que hay que hacer para ganarlo.
Restaurantes con el síndrome de la cocina cerrada y cartas con 20 platos, por ejemplo.
Otros ponen logos de clientes en sus webs. O firmas en sus emails.
Y se despiden con un «atentamente».
Esas son las obvias, las superficiales. Hay más:
- ¿Te puedo ayudar?
- ¿Quedamos para una reunión?
- Ya me dices…
- Te llamo para ver si viste lo que te envié…
- …y si hay avances
- …o si habéis decidido algo
Ahora podríamos hilar fino.
Hablar de actitudes, frases, preguntas y respuestas que dice toda la gente a la que le da miedo el dinero. Y vivir mejor. Esto es lo que más miedo da de todo.
Son muchas. Las personas, los dichos y los hechos.
Tantas que cuando te das cuenta te vuelves menos idiota y los demás piensan que más gilipollas, porque dices cosas como que ganar dinero no es tan difícil.
Sé que jode, pero es lo que hay.
Lo difícil no es ganar dinero, lo difícil es quitarse el miedo al dinero.
Eso lo soluciono en el newsletter, ahí encontrarás cursos. Y la gente que los hace publica twitts como este:
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