- Hablar de manera rebuscada.
- Presumir de hablar de manera rebuscada.
- Presumir de listo.
- O de guapo.
- O de gracioso.
- O de tener labia o don de gentes.
- O de tenerla larga.
- El currículum.
- O mencionar lo que has estudiado sin que nadie te lo pregunte.
- Y tener portfolio.
- Los logos de clientes.
- La sección «Quiénes somos», doble de puntos si empieza con «Esta empresa nace con el objetivo de…» o «Líderes en el mercado desde…»
- Mencionar a quién conoces o con quién has trabajado.
- Negociar tus precios.
- Decir «gracias», «por favor» y «lo siento» por chorradas sin importancia.
- Hacer esperar a gente.
- Preguntar «¿Te pillo ocupado?» o «¿Tienes cinco minutos?»
- Mandar un WhatsApp preguntando si puedes llamar.
- Tener un título más largo que el Conde Duque de Olivares, doble de puntos si es en inglés, triple si es para ocultar que eres vendedor.
- Usar PowerPoint.
- Ir a las reuniones con portátil.
- Hablar de la competencia. No digo criticar, digo hablar.
- Contestar a la pregunta «¿Qué tal os va?» con el número de empleados.
- Hacer propuestas personalizadas.
- Hacer propuestas.
- Tener una firma de email que parece Times Square.
- Meter prisa a tus proveedores o compañeros en la víspera de un festivo y luego desaparecer.
- Empezar un discurso o presentación con «Voy a ser breve.»
- Decir «Y ya concluyo.»
- Concertar reuniones que podían haber sido una llamada.
- Llamadas que podían haber sido un email.
- Y enviar emails que se podían haber evitado.
Ninguna de esas acciones son las acciones de un líder, de alguien con autoridad. De alguien que sabe a dónde tiene que ir, cómo ir y cómo dirigir los demás para que lleguen con él.
Lo que hace alguien sin complejos, alguien que domina la situación y es consciente de su valor es:
- Escuchar todas las oportunidades.
- Hablar poco.
- Hablar a todo el mundo con la misma claridad con la que hablaría a sus abuelos.
- Decir no y no lo sé.
- Reconocer sus errores.
- Empezar contando lo malo.
- No temer al dinero.
Esto puede parecer difícil, y la verdad es que lo es cuando no tienes una audiencia propia y tienes que salir todos los días a cazar.
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